Para desarrollar la mayoría de nuestros
proyectos inmobiliarios, nos basamos en un
sistema cooperativo. Esto quiere decir que los fondos para llevarlos a cabo son aportados entre
todos los propietarios, sin inversión previa. Nuestro rol es administrar estos fondos y cada propietario es, a la vez, un pequeño inversor.
Además, para responder a otro tipo de demanda, hemos implementado distintos sistemas a precio cerrado para ajustar la financiación en función a las necesidades y tiempos de su desarrollo.