Ubicadas en el delta de San Fernando, estas urbanizaciones campestres con onda isleña conformaron el primer emprendimiento de descanso desarrollado por Eidico. Fue una novedad porque es un conjunto de chacras en un predio atravesado por canales, arroyos y riachos a las que sólo se accede en lancha. Cuenta con una plantación de álamos de 70 ha y una laguna de 9 ha con isla y playa de uso común.
“El gran calado de las costas permite el ingreso de embarcaciones de todo tipo, incluso las más grandes. En el área de uso compartido se pueden practicar todos los deportes acuáticos que no requieran el uso de motor”.